jueves, 30 de diciembre de 2010

Que no importe

Un día te levantas con la firme decisión de que la caída no importe. Sabes que es mentira y que el momento de tocar el suelo será doloroso. Te repites: "Que no importe, que no importe". Sólo hay que decirlo las veces suficientes para coger el impulso justo y lanzarte. Una vez iniciado el descenso ya no tienes que pensar nada porque no hay vuelta atrás. Ya volverás a devanarte los sesos cuando veas la importancia del golpe.

2 comentarios:

José Carlos Rodrigo Breto dijo...

Nunca hay vuelta atrás. Lo sabes. Es todo un asco.

Ele dijo...

"Que el mundo fue y será una porquería ya lo sé..." http://www.youtube.com/watch?v=fsAGpw5uwDU Hay que aprender algo de los tangos: los dramas duran tres minutos. Muchas veces las vueltas atrás son un asco mayor.